En ocasiones no sabemos muy bien a qué distancia pulverizarnos el perfume y lo hacemos demasiado cerca de nuestra piel, lo correcto es aplicarlo a unos 20 centímetros de ella. Si tu piel se moja con el rociado, será porque la botella estuvo muy cerca.
El perfume hay que aplicarlo en las llamadas zonas cálidas de nuestra piel, ya que la presión sanguínea corre más cerca de la epidermis, lo que dará como resultado una liberación constante del aroma escogido. Son por ejemplo el cuello, las muñecas, el pecho, cara interna de los codos, detrás del lóbulo de la oreja.
Es importante no frotar la piel una vez aplicado el perfume, de esta manera no conseguirás que el perfume se impregne en tu piel, sino que solo lograrás desgastar la fragancia, en vez de penetrarla en la piel.
Os aconsejamos que lo apliquéis y dejéis que penetre por sí solo en la piel.
Perfúmate inmediatamente después de salir de la ducha, el poro está dilatado y esto facilita la absorción del perfume.
Es conveniente que tu piel esté hidratada, ya que el perfume impregna mejor en las pieles grasas que no en las pieles secas.
También puedes perfumar tu ropa, considerando que la gran mayoría de los tejidos naturales, como por ejemplo la lana, el lino o el algodón exhalan el olor perfectamente, pero otros tejidos como son los sintéticos alteran el aroma del perfume e incluso pueden aparecer manchas en tu ropa.
Si quieres perfumar tu cabello, no lo hagas directamente sobre él, sino que puedes aplicarlo sobre el cepillo.
Otra forma de que el perfume permanezca durante más tiempo en nuestra piel es aplicando un poco de vaselina sobre las zonas cálidas que comentábamos en el consejo nº 2.
No debes exponer los frascos a temperaturas altas ni directamente a la luz solar y procurar que no sufran cambios bruscos de temperatura.
Mantenlos enlugares frescos, y si es posible en algún armario y dentro de su caja, de esta manera el aroma se conservará mucho mejor y durará mucho más tiempo.
No uses una cantidad excesiva de perfume, hay que ponerse perfume en su justa medida. Aunque después de un tiempo de haberte aplicado el perfume no notes su olor, él está ahí, solo que nuestro olfato se habrá acostumbrado a él y no lo notará.
¡Esperamos que estos consejos os sirvan de ayuda para disfrutar al máximo de vuestros aromas favoritos!.